Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. El apogeo de Xochicalco tiene lugar en el período llamado Epiclásico (650 – 900). Durante este lapso se construyó la mayoría de la arquitectura monumental visible hoy en día; su desarrollo y surgimiento se debe entender a partir de su relación con Teotihuacan, el asentamiento dominante en Mesoamérica a lo largo del período clásico.
De acuerdo con algunos investigadores, Xochicalco surgió tras el abandono de Teotihuacan para ocupar el vacío de poder económico y político provocado por ese hecho.
El principal atractivo del Sitio Arqueológico es la pirámide de la serpiente emplumada. Así mismo, hay un notable observatorio dentro de una cueva con escalones labrados hacia el interior, en donde en el Equinoccio los rayos solares la iluminan creando un haz de luz extremadamente brillante.