na reinterpretación de la cocina del sureste y centro de la República Mexicana, acompañada de técnicas y texturas de influencia oriental, es el cimiento de la cocina de Patio 603. De igual forma, la arquitectura forma parte de la experiencia sensorial, teniendo como marco para la degustación de nuestras texturas y sabores un amplio patio central, el cual data de finales del siglo XIX y perteneciente a una posada destinada al alojo de párrocos locales. Esta mezcla de sabores de antaño retomados en la cocina contemporánea, es lo que genera un deleite al paladar, aunado a un ambiente relajado y acogedor que permite disfrutar cada bocado al máximo.